¿Qué es la toxina botulínica para arrugas faciales?

Las primeras señales de envejecimiento suelen ser las arrugas alrededor de los ojos, la frente, las mejillas y los labios. Para reducir la aparición de arrugas, se utilizan inyecciones de toxina botulínica. Estas inyecciones, a menudo conocidas por nombres comerciales como Botox, Daxxify, Dysport, Xeomin y Jeuveau, relajan ciertos músculos faciales, haciendo que algunas arrugas sean menos visibles temporalmente.

Tras el tratamiento, las arrugas disminuyen significativamente, incluso al contraer los músculos faciales. Existen tres tipos de arrugas: dinámicas, estáticas y líneas y arrugas finas.

Las arrugas dinámicas aparecen debido al movimiento de los músculos faciales al sonreír, reír o fruncir los ojos. Comúnmente se localizan alrededor de los labios, en la frente y entre las cejas, así como las "patas de gallo" en las esquinas de los ojos. Todos tenemos arrugas dinámicas desde el nacimiento. Con el paso del tiempo, estas arrugas se hacen más profundas y visibles. La toxina botulínica se puede emplear para atenuar la apariencia de estas arrugas dinámicas y también para demorar o evitar que se conviertan en arrugas estáticas.

Las líneas finas y arrugas aparecen cuando la cantidad de colágeno en la piel empieza a disminuir. El colágeno, una proteína situada justo debajo de la superficie de la piel y entre sus capas más profundas, puede reducirse debido al envejecimiento y al daño solar. Esta disminución provoca que la piel del rostro se estire y ceda, formando así arrugas leves.

¿ Quién es candidato para este tratamiento?

Para recibir inyecciones de toxina botulínica, se requiere estar saludable y tener al menos 18 años de edad.

No todas las personas son candidatas para recibir inyecciones de toxina botulínica. Por ejemplo, no se recomienda para quienes:

Padezcan enfermedades neuromusculares, como la esclerosis múltiple o la miastenia gravis.

Estén embarazadas o en periodo de lactancia.

Presenten debilidad en ciertos músculos faciales.

Tengan ptosis (párpados caídos), piel facial muy gruesa o facciones asimétricas.

Sufren de problemas cutáneos cerca del área donde se aplicaría la inyección.

Si está considerando las inyecciones de toxina botulínica, es importante comunicar a su médico su historial médico completo, así como cualquier medicamento, vitamina o suplemento herbario que esté tomando.

¿Cómo funciona la toxina botulínica?

La toxina botulínica, producida por una bacteria específica, puede ser tóxica en dosis altas, pero en pequeñas cantidades se utiliza para suavizar las arrugas faciales. Al administrarse, bloquea ciertas señales nerviosas que provocan la contracción de los músculos, lo que resulta en una relajación muscular y una disminución de las arrugas. Este efecto puede durar de tres a seis meses, o incluso un año, dependiendo de la calidad y la marca del producto. Con el tiempo, los músculos retoman su actividad y las arrugas reaparecen.

En nuestra clínica, antes de inyectar la toxina botulínica, aplicamos una crema anestésica para minimizar las molestias en el área tratada. Luego, se inyecta la toxina en los músculos faciales específicos durante un procedimiento rápido que se lleva a cabo en la consulta médica. Es crucial consultar con el médico acerca de las precauciones post-tratamiento.

Tras la aplicación, en la primera semana se notará una relajación de los músculos y una reducción visible de las líneas y arrugas faciales, efecto que puede perdurar hasta un año.